A principios de este curso, cuando se dio a conocer el Anteproyecto de Ley de Educación, miles de personas a favor de la escuela pública vasca manifestamos nuestro desacuerdo por las calles de Bilbao. Ahora que estamos a final de curso, queremos volver a mostrar nuestra disconformidad con el Anteproyecto de Ley aprobado por el Gobierno Vasco y presentado recientemente en el Parlamento, ya que sigue en la misma línea. Ésta no es la ley que necesita la escuela pública vasca, pues en vez de consolidarla la debilita.

Los agentes que conformamos el EEPH Topagunea tenemos muchas razones para estar a favor de la Escuela Pública Vasca.

La escuela pública es la única red que garantiza el derecho a la educación de todo el mundo. El derecho a que todos los alumnos y alumnas estudien con éxito, independientemente de su origen o condiciones socioeconómicas, culturales o personales; es un derecho universal. La educación pública garantiza la igualdad de oportunidades a todo el alumnado y equilibra situaciones sociales desiguales.

Abarca a toda la sociedad y tiene como símbolo la diversidad, dado que por su naturaleza es inclusiva e integradora. Sólo así se puede garantizar que la ciudadanía del futuro forme una sociedad cohesionada.

Asimismo, la escuela pública es una escuela laica. En ella tiene cabida todo el alumnado sea cual sea su creencia religiosa, independientemente de la lengua, la etnia o la cultura, es el hogar de todas las escuelas. Garantiza la tolerancia y respeta las múltiples opciones ideológicas, políticas y morales. Por tanto, educa a una ciudadanía crítica, capaz de pensar y decidir por sí misma.

El eje de la escuela pública vasca es el euskera, el principal elemento unificador entre todos y todas. Precisamente, en las últimas décadas ha sido la escuela pública vasca la red educativa que más alumnado ha euskaldunizado. Y hoy en día se ha convertido en un agente fundamental en el proceso de euskaldunización.

Es una opción educativa de calidad. Además de intentar dar respuesta a las necesidades individuales, sus aulas son cantera de alumnado excelente.

Y además es una escuela cercana, de Km 0, que en general no necesita transporte.

En definitiva, la escuela pública vasca es universal, inclusiva, equilibradora, plural, laica, euskalduna, de calidad, cercana y gratuita. La escuela pública es de todos y todas, para todos y para todas. Es de todos y todas, porque los equipos educativos, alumnado y familias que la componemos trabajamos colectivamente en ella, y es para todos y todas, porque tiene las puertas abiertas a cualquiera.

 Dicho esto, en estos días en los que el debate en torno a la Ley de Educación va acomenzar su tramitación en el Parlamento, queremos manifestar nuestra negativa a este Anteproyecto de Ley, entre otras razones, por las siguientes.

En primer lugar, esta Ley no sitúa a la escuela pública en el centro del sistema educativo. De hecho, perpetúa el sistema dual Público-privado a través del recientemente inventado Servicio Público Vasco de Educación. Esta estructura no tiene base jurídica y resulta totalmente anacrónica en la Europa de hoy en día. Iguala a la red privada y a la pública como si fueran lo mismo, aun sabiendo que ambos son totalmente distintos respecto a sus objetivos y condiciones.

No prioriza la escuela pública, sino que garantiza a los centros concertados su financiación para una larga etapa. La escuela pública, por el contrario, necesita una planificación estratégica que la extienda a todos los barrios y pueblos, dotada de infraestructuras adecuadas y recursos suficientes para que se convierta en la principal red de referencia del sistema educativo.

Introduce a todos los centros, incluidos los públicos, en la lógica del mercado a través de los contratos-programa. Fomenta una alocada carrera competitiva entre todos los centros. Al no ser el punto de partida ni las condiciones iguales para todos los centros, esta competencia perjudica al sistema público.

No garantiza la euskaldunización del alumnado, ya que no especifica cómo, ni con qué medios, se lograrán los objetivos marcados. Las medidas artificiales que propone para hacer frente al grave problema de segregación que padece el sistema educativo son inútiles, ya que no aborda el problema de raíz.

No apuesta por una educación realmente laica, pues no incluye concreciones claras al respecto.

Por todo ello, queremos manifestar claramente nuestra discrepancia e insistir en que la Ley de Educación que quieren aprobar no tiene acuerdo social. Nosotros queremos un sistema educativo diferente que ponga realmente a la escuela pública en el centro, para caminar hacia una educación igualitaria y euskaldun que favorezca la cohesión social.

Así, volveremos a llenar las calles a favor de la escuela pública vasca, como ya hicimos el pasado mes de noviembre en Bilbao. La cita será el 9 de junio en las tres capitales de la Comunidad.

Las manifestaciones partirán a las 18:00 de la tarde:

En Bilbao, desde la Plaza Elíptica

En Vitoria-Gasteiz, desde la Plaza Nueva

En San Sebastián, desde el Boulevard

Llamamos a toda la sociedad a participar en las movilizaciones:

¡El 9 de junio, todos y todas a la calle!

EUSKAL ESKOLA PUBLIKOAZ HARRO TOPAGUNEA

Gasteizko, Oiongo, Bilboko, Santurtziko, Oarsoaldeako, Donostialdeko, Lasarte- Oriako, Aiztondoko eta Urola Kostaldeko plataformak; Ordiziako Euskal Eskola Publikoko Komunitateak, Amurrioko Hezkuntza Publikoaren Sarea, Tolosako Samaniego-Orixe Ikastetxeak eta Debagoieneko Goieskola; EHIGE, HEIZE, Ikasle Sindikatua, Ikasle Ekintza, Gazte Komunistak, STEILAS, CCOO Irakaskuntza, ESK.